Esta tarta tan elaborada, la he creado para un niño muy especial. Se llama Bruno, el hijo de una de mis mejores amigas, y se merecía una tarta algo distinta ya que este último año para él y sus padres ha sido muy difícil y duro por su salud.
Además esta tarta esta hecha con harina sin gluten, por ser celiaco. Y como nunca había utilizado este tipo de harinas se hundió al final del horneado. Pero quedo muy rica y jugosa por dentro. Además esta rellena de chocolate y nata, que son sabores que a él le encantan.
Por fuera lleva una capa de fondant y las figuras también están hechas con fondant, menos el muñeco que era lo único de esta tarta que no se comía. Está hecha con masas, era para que a él le quedara un recuerdo de esta tarta.
Disfrute mucho haciendo todos los detallitos que lleva. Y los niños antes de cortar la tarta ya estaban pidiendo que se iban a comer cada uno cuando se les dijera que podían empezar. 
Y como se puede comprobar aquí no solo le gusto a Bruno sino a todos los del cumpleaños y así quedo la tarta que tanto tiempo y esfuerzo me había costado hacer. Es la pena de estos pequeños obras, tienen mucho trabajo quedan muy bonitos pero son efimeros por que al comerse todo desaparece. Pero para eso se hacen para disfrutar tanto haciendo como comiéndosela después.
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